Secreto nº 1
Me hubiera venido de perlas uno de estos.
Cuando tenía cinco años me cagué encima estando en el colegio. Obviamente, ya era demasiado mayor para semejante desliz.
No dije nada a nadie.
Callé y aguanté estoicamente hasta que al mediodía salí del cole. Recuerdo el camino a casa, por la Avenida de Perez Galdós, caminando con aquello pesado y húmedo intentando hacerse hueco entre mis ingles.
También recuerdo una especie de inocente culpabilidad.
No sé muy bien qué pasó al llegar a casa. Supongo que mi santa madre me limpiaría, porque yo mira ahí bajo y la cosa está limpia.